MATRACA

Ayer, 28 de agosto del 2010, terminé la "prima stesura" (primera redacción- pero me gusta más la expresión italiana, eso de stesura suena como extensión sobre la tierra... algo asi) decía, terminé la primera redacción de "Matraca, o Las relaciones de un argentino", novela que comencé, según algunas anotaciones, en abril de 1989....... Sí, de tan lento se puede decir que soy un escritor aficionado... En maravillosa entrevista a Cortázar, que justo vi el otro día en Canal Encuentro, él se definía como escritor aficionado, no profesional, y me sentí hermanado...
Once años. Por las patas... Porque ya hay cosas de este "próximo" trabajo en el comienzo de "Amor Fati" de la Familia Fortuna, que creo que escribí bastante antes de esa fecha...
Todavía falta mucho, claro, pero los 13 capitulos ya están. Hay que podar, corregir, editar(editing) llenar huecos y equilibrar y etcetera... Pero, de pronto, en estos días, me dije: En medio de la bruma(depre) pongámonos a hacer al menos algo, y corte, mezclé, suprimí y ordené. Ya veo que todo lo que queria (o sea, de mi imagen de lo que Matraca debía ser...) habrá, quedará, resultará un 20% con suerte...pero, me dije, mejor alguito que nada. Y como diría Matraca "No se me puede hacer un cargo por el deseo"
Luego, cuando me di cuenta que los 13 YA capítulos estaban... me sobrevino un ataque de soledad, porque no podia compartirlo ni festejar tan magno evento con las pocas personas a las cuales les importaba que yo termine esa novela... Nombro a dos, que son a los que más extrañé:Horacio y Osvaldo. Pero, bueno, después de ver un casi genial episodio de Life on Mars (el encuentro con el padre!!!) y un episodio de Maigret(inglés?) y luego de fumar mucho, y de acompañar el chocolate amargo con liquore Strega, me tomé una pastillita y me fui a dormir... Hoy, fui al gim, hice escalador y nadé. Y volví a estar en paz conmigo, masomenos, no exageremos... Ahora empieza la parte más linda: ya Matraca bajó a tierra, está entre nosotros(o sea, está fuera de mi) y ahora ... a corregir. Que placer!